Invierte en proyectos inmobiliarios de crowdfunding
En la calle empedrada de Cruz Verde, cerca de la colonia San Jerónimo, en el sur de la Ciudad de México, Joaquín Rivera, Carlos Muñiz y Axel Curiel vieron en un terreno de 435 m² la oportunidad de construir una casa habitación. Este proyecto residencial plus sería el primero de Grupo Tau, la desarrolladora inmobiliaria que fundaron juntos en marzo de 2015.
Con sus ahorros compraron el terreno baldío, pero para empezar a construir la residencia de 3.5 pisos necesitaban 3 millones de pesos (MDP). Primero tocaron la puerta de Inbursa, Santander y Banorte, pero les pedían experiencia y garantías tres a uno para respaldar el préstamo. Si el terreno adquirido valía 3.2 millones de pesos, sólo estarían recibiendo 1.5 millones y la propiedad se quedaría en garantía. Dos Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes) fueron su segunda opción, pero el porcentaje de entre 18 y 19% de interés que pedían era demasiado para sostener su pequeña desarrolladora.
Su última alternativa fue apostar por el crowdfunding o financiamiento colectivo. Un esquema que permite a los pequeños inversionistas poner su dinero en desarrollos inmobiliarios, con cantidades desde 25,000 pesos, y obtener retornos superiores a los que arroja el IPC en un plazo promedio de uno a dos años.
Adolfo Zavala, cofundador de Expansive, señala que es un ganar-ganar. “Por un lado, cubres las necesidades de capital de estos desarrolladores y, por otro, abres la puerta a inversionistas potenciales que tienen intención de diversificar su portafolio y obtener más y mejores rendimientos que otros instrumentos de inversión”.
El financiamiento sucede normalmente por deuda o esquemas de coinversión. Tau aplicó la primera ronda respaldada con pagarés a tasa fija de 14%. Hoy, la obra se encuentra en el cuarto mes de avance, y a través de Expansive, los emprendedores informan de cómo va el proyecto. Los inversionistas podrán ver retornos a mediados de 2017, una vez que la casa se vend
El modelo de Expansive es similar al que operan Briq e Inverspot, las otras dos plataformas mexicanas a través de las cuales los pequeños inversionistas pueden financiar proyectos inmobiliarios.